Soy un amante de los animales, y se me puede reconocer porque soy de esas personas que ponen cara tierna al ver un pequeño cachorro jugando en la calle o se ríe viendo las travesuras de los miles de vídeos sobre gatos que circulan por la red.
Hablando de gatos, seguro que todos hemos visto una multitud de pelajes de los mismos: lisos, atrigrados o los conocidos como calicó. A estos último me voy a referir en esta entrada, ya que su pelaje es un hecho genético bastante curioso y que esta relacionado con una enfermedad humana relativamente poco conocida.
Para quien no sepa lo que es un gato calicó (Wikipedia):
Gatos en los cuales el pelaje blanco muestra manchas marrón-anaranjado y negras.
Y como bien dicen, una imagen vale más que mil palabras:
Seguro que esto sigue sin deciros mucho, pero para explicarlo me voy a tener que remitir a un poco de genética básica, sobre todo la reproductiva.
En gatos, como en humamos, el género femenino está determinado por el par XX de cromosomas sexuales, mientras que el masculino por el par XY. Los óvulos siempre van a portar un cromosoma X, mientras que el espermatozoide "será el encargado" de determinar el sexo debido a que puede portar un cromosoma X o uno Y.
Hasta aquí bien, ahora viene lo curioso: el cromosoma Y es más pequeño que el X, por lo que la carga genética (cantidad de información contenida en los genes) es mayor en las hembras que en los machos, debido a que éstas presentan ambos cromosomas X. Para solucionar este problema se produce un fenómeno denominado Inactivación del Cromosoma X. Este proceso (sin entrar demasiado en materia) lo que hace es que uno de los cromosomas X se comprime en la célula de tal manera que la información que contiene no es accesible y no se expresa, a este cromosoma X súpercomprimido se le denomina Corpúsculo de Barr. La inactivación se produce al azar en las células de las primeros etapas del cigoto. Casualmente, en los gatos el gen que determina el color del pelaje se encuentra en el cromosoma X, por lo que al inactivarse al azar los cromosomas X habrá zonas del cuerpo con un color de pelaje determinado y otras zonas con otro color.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver eso con los humanos? En humanos ocurre exactamente el mismo fenómeno, salvo que el gen que encontramos en el cromosoma X (uno de ellos jajaja) es el que determina la presencia de glándulas sudoríparas en la piel. Se puede dar el caso de que uno de los cromosomas X tenga ese gen dañado y no de lugar a las futuras glándulas sudoríparas en la piel, pero que el gen del otro cromosoma esté intacto. Debido a el fenómeno de inactivación al azar habrá zonas de la piel que no presenten glándulas sudoríparas y zonas en las que si las haya, dando lugar a la Displasia Anhidrótica Ectodermica o mosaico de glándulas sudoríparas de la piel.
Espero que esta entrada os guste y me haya explicado, si no, contactad conmigo para las mejoras. ¡Ya sabéis donde encontrarme!
No hay comentarios:
Publicar un comentario